¿Cómo fue el 2020 y cuáles son las perspectivas para el 2021? Actores del rubro dan las pautas para comenzar este año con pie derecho.
Verónica Muriel C.
El año que se va fue diferente y atípico para todos. Y el sector inmobiliario no fue ajeno a ello. ¿Qué esperar el 2021?
A decir de Franz Rivero, socio y CEO de Uno Corporación Inmobiliaria, las empresas del rubro deben mantenerse en alerta por la situación económica. El ejecutivo recomienda ser más eficientes con los costos, creativos con las propuestas de valor y diversificarse, ya sea en la misma actividad inmobiliaria o en otra.
No obstante, indicó que por muy compleja que pueda ser la economía nacional, el mercado inmobiliario seguirá mostrando dinamismo. “Se van a seguir realizando transacciones, solo que a precios diferentes”, expresó Rivero, a tiempo de agregar que lo importante es cómo hacerlo para ser efectivos y eficientes.
A su vez, Cleya Menacho, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Santa Cruz (Caincruz), manifestó que las perspectivas para el 2021 son esperanzadoras. “El rubro no para, siempre hay algo que vender, comprar o alquilar, lo que cambia son los precios; mientras no volvamos a una cuarentena estricta la economía seguirá en movimiento”, dijo.
LAS OPORTUNIDADES
Las épocas complejas o de crisis, sean leves o profundas, son oportunidades para quienes saben aprovecharlas. Afortunadamente, la actividad de intermediación inmobiliaria tiene trabajo en cualquier coyuntura, porque el mercado demanda y oferta bienes inmuebles siempre, expresó Rivero.
Para el ejecutivo el 2021, todavía con pandemia de por medio, representará una oportunidad para quienes saben leer la realidad y actuar en consecuencia, como por ejemplo la identificación de inversores, sean independientes o pools (grupos) que busquen una buena rentabilidad y la encuentren en la compra de inmuebles para renta.
De igual forma, mencionó las negociaciones de espacios en alquiler para el sector corporativo, los estudios de mercado inmobiliario para nuevos proyectos o empresas, o el desarrollo de alguna solución tecnológica para beneficio de los corredores inmobiliarios o del mercado (compradores, vendedores, inquilinos). Esos servicios no son tradicionales en el mercado inmobiliario cruceño, pero representan una oportunidad para quienes quieren diferenciarse en esta actividad cada vez más competitiva.
2020, UN AÑO COMPLICADO
El año comenzó con una desaceleración de la economía profundizada por la crisis política y social que vivió el país en 2019. “La gente tenía miedo a invertir por la incertidumbre que generaba las elecciones de octubre del 2019”, lamentó Cleya Menacho.
Los primeros dos meses del año fueron de recuperación a un buen ritmo, tanto para los alquileres como para las ventas y anticréticos, “pero no contábamos con que a finales del 2019 iba a surgir una enfermedad como el Covid-19, que llegó a nuestro país a mediados de marzo del 2020, tiempo en el que se dispuso una medida impredecible como la cuarentena rígida”, recordó Franz Rivero.
El encierro colectivo frenó drásticamente las operaciones inmobiliarias, más allá del uso parcial que se pudo hacer de herramientas tecnológicas, como videos, fotos, renders, mensajería instantánea, paseos virtuales, plataformas, big data, etc., conocidas en el rubro como proptech (property technology). El cierre de las transacciones inmobiliarias fue imposibilitado por carecer de normas que permitan la digitalización integral de los contratos y trámites inmobiliarios, como la firma de contratos de venta de manera digital y con validez legal, cambios de nombre en planos de uso de suelo, certificados catastrales y registro en Derechos Reales, todo en la vía digital, sin papeles.
En julio se empezó a reactivar la economía nacional en la mayoría de los sectores y el inmobiliario, en particular, sigue avanzando a paso lento porque los efectos de la crisis sanitaria por el Covid-19 aún se sienten, lamentó Rivero. Adicionalmente, “Bolivia pasó por un proceso electoral complejo, en plena pandemia, que generó incertidumbre hasta hace unas semanas por nuevas evidencias de fraude electoral que no tuvieron ningún efecto”.
Los precios de los inmuebles en general, sean departamentos, casas, terrenos, locales comerciales y oficinas, han sufrido un ajuste a la baja a partir de la cuarentena rígida. No obstante, Rivero puntualizó que las propiedades que apuntan al estrato medio-alto y alto han tenido poca afectación en sus precios, debido a que la mayoría de los propietarios de ese estrato no tienen necesidades apremiantes de efectivo que podría motivarlos a rebajar precios para capitalizarse.
De acuerdo con Oliver Viera, presidente de RE/MAX Bolivia, los precios han bajado hasta un 30% en departamentos y entre el 12 al 15% a nivel nacional en lo que respecta a casas. El ejecutivo aseguró que el crecimiento en el sector de bienes raíces es muy prometedor. “Invertir en bienes raíces es lo más seguro que una persona puede hacer si hay inciertos económicos”, destacó.