La ABC amplió el plazo de entrega de la carretera, contrato llave en mano, de mayo a octubre 2024, para reparar todas las fallas del proyecto. Pese a que hay puentes y túneles nuevos, un ingeniero asegura que los pavimentos tienen desgaste prematuro.
Eliana Ferrufino A.
En un análisis sobre el estado de la doble vía El Sillar, la carretera que conecta occidente y oriente, el ingeniero civil e hidrólogo Gonzalo Maldonado Rojas, presidente de la Asociación de Ingenieros Eméritos de Cochabamba (Asieme), contextualizó que, en diciembre de 2023, Sinohydro ofreció realizar investigaciones y construir viaductos.
Sin embargo, la Asieme, en tres visitas que realizó se encontró que no hay esas obras, y continúan incrementándose los problemas desde ese tiempo. “El estado de la carretera es peor que la existente hasta el año 2015, aunque hay puentes nuevos y tres túneles, los pavimentos tienen desgaste prematuro”, lamentó.
Históricamente, las inversiones en la carretera Cochabamba –Villa Tunari – Montero fue de $us 430 millones, y en 28 km se gastó $us 459 millones. De la obra, la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) pagó el 99.8%, es decir $us 425.2 millones, solo queda por pagar $us 800.000.
“En toda la historia de proyectos nunca se vio esta figura, el contrato no establece cuánto se paga hasta la entrega provisional, y también a CYPLA-EPTISA además de reajuste del 10% le cancelaron el 95%”, indicó.
El ingeniero describió las pérdidas que han dejado las irregularidades en la carretera: Bolivia queda sin carretera que vincule Oriente con Occidente, una frustración para el transporte, el país perdió $us 459 millones, el tramo de El Sillar y la ABC debe disponer al menos de $us 8 millones solo para mantenimiento anual.
Según Maldonado, los responsables de esta situación son el ministro de Obras Públicas del año 2013, la presidenta de la ABC que firmó el contrato, el presidente que sucedió y el actual Ing. Claure, los consultores para licitar la obra y Sinohydro.
Consultado sobre las fallas que tuvo la empresa constructora, mencionó que “no elaboró un proyecto con investigaciones en geología, geotecnia, hidrología, hidráulica, control de calidad, tanto de estos ítems como de calidad de obras, no instalaron inclinómetros y no se conoce especificaciones técnicas deficientes y calidad de materiales”.
Otras fallas que señaló fue la calidad de hormigones en las obras hidráulicas, no reconstruyeron las obras que han colapsado, están repitiendo obras como muros con gaviones que no han resistido a los empujes de las masas de terreno que se mueven y además se duda de los trabajos que ejecuta para su permanencia en el tiempo.
Sobre las reparaciones, dijo que estas se limitan a tratar de estabilizar la plataforma con inyecciones de cemento, que no soportarán los “empujes” que se generan por la cantidad de agua que se infiltra de la precipitación.
“Los puentes, túneles y viaductos no han sufrido daños, es prematuro sobre la calidad de estas obras. Sin embargo, la plataforma es vulnerable y continuarán los asentamientos y agrietamientos”, acotó.
La revista Construmarket se contactó con la ABC por semanas para conocer detalles de los avances de las reparaciones, pero no hubo respuesta. Primero se hizo el requerimiento con el ingeniero Boris Valdiviezo, responsable del tramo I de la gerencia regional Cochabamba.
La solicitud se derivó a Sandra Mariscal de la oficina nacional de la ABC, quien finalmente informó ya no contestó, su último argumento fue que “llegaron varias solicitudes sobre otros proyectos, y van respondiendo a medida que les llega”.
DESDE SUS INICIOS TUVO PROBLEMAS POR FALLA GEOLÓGICA
Maldonado expuso que el tramo de la Doble Vía El Sillar, de 28 km, es una zona con problemas de estabilidad de taludes y asentamientos del pavimento, además de un continuo derrumbe.
“Los problemas son: calidad de suelos, es decir, geología y geotecnia; precipitación anual entre 4.000 y 5.500 mm, pues llueve 200 días al año y son continuas por 15 días; impacto ambiental por deforestación y obras de infraestructura como oleoducto y líneas de alta tensión, y una falla geológica que atraviesa los 28 km”, dijo el ingeniero.
En 2013, según Maldonado, el Gobierno decidió resolver esta situación con obras especiales. Una consultora (CONNAL LPZ) elaboró un Estudio de Identificación, un Informe muy superficial para licitar la obra, con una inversión de $us 411 millones.
“A los ingenieros de Asieme, la ABC nos envió el resumen ejecutivo. Luego de revisar el documento les dimos nuestro criterio: con ese informe era difícil asegurar un buen resultado, también que puedan ejecutar obras, y que en un par de años nuevamente la zona continuaría con los problemas señalados. Por tanto, sugerimos que busquen otra ruta, que asegure operaciones durante los 365 días del año”, explicó.
La obra tiene financiamiento del Eximbank de la China, el contrato de Sinohydro es de $us 427 millones (el crédito es de $us 363 millones y el aporte local es de $us 64 millones); $us 5 millones para CYPLA-EPTISA, $us 22 millones para el Programa de Reposición de Pasivos (PRP), que hace un total de $us 454 millones.
A esa (cifra) total, se debe agregar $us 5 millones por la administración de 2010-2024, entonces el total general es de $us 459 millones, que resulta tener un costo de $us 16,4 millones por kilómetro, “la obra más cara en toda la historia de Bolivia y también con relación en obras en otros países vecinos”, detalló Maldonado.
Acerca del contrato, el experto expresó que se trataba de “llave en mano”, que establece tres años (2015-2018) para tener el diseño de obras, y tres años (2018-2021) para construir. “Existen grandes observaciones a los Contratos de Sinohydro y de CYPLA-EPTISA, que la ABC se ha resistido a aclarar, ni a la demanda de Asambleístas Nacionales. La obra tiene dos etapas de entrega: provisional y definitiva, 180 días para salvar observaciones, dos años de mantenimiento y cinco años de garantía”, contextualizó.
Si bien Sinohydro logró realizar la entrega provisional el 23 noviembre de 2023, el 8 de diciembre se presentaron una serie de derrumbes y deslizamientos que demuestran, según Maldonado, una mala calidad de ingeniería, pésima fiscalización por parte de la ABC y CYPLA-EPTISA es una empresa que no hizo nada, pero la ABC lo niega.
En cuanto a ingeniería, expuso aspectos como investigaciones, estudios, diseños pésimos, en obras de drenaje con secciones insuficientes, quebradas sin control de los caudales que se generan, pendientes elevadas de los taludes, muros de hormigón armado colapsados, plataformas con asentamiento y tramos que se caen.
