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Los riesgos en la construcción de edificios

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Interseguros organizó la segunda versión del Seminario Construcción Segura, con el objetivo de compartir conocimientos
técnicos de arquitectura, ingeniería y construcción con el sector asegurador.

Verónica Muriel C. 

Los riesgos en la geotecnia se encuentran entre las principales causas de pérdidas en la industria de la construcción. Estos riesgos pueden ser disminuidos cumpliendo las normas vigentes internacionales al respecto, porque en Bolivia no existen, indicó Mario Terceros, experto en geotecnia y ejecutivo de la empresa Incotec, en el marco del Segundo Seminario Construcción Segura, organizado por Interseguros.

Asimismo, explicó que para disminuir los riesgos geotécnicos es necesario realizar estudios de alta calidad; verificar en campo los diseños en base a ensayos de carga y definir adecuadamente los métodos constructivos.

“Se debe tomar en cuenta tecnología con capacidad de registrar los procesos constructivos, respetándolos, de manera que por una falsa sensación de economía no se ejecuten pasos que después resulten ser más caros”, agregó. No obstante, “los riesgos son inherentes a cualquier actividad que involucre materiales y fenómenos de la naturaleza”.

Según el experto, para que las pólizas de seguros sean correctamente cotizadas, las aseguradoras deben tener departamentos que entiendan los riesgos de la construcción y, de esta manera, puedan calcular los riesgos en términos económicos.

A decir de Rodrigo Fernández, gerente general de Interseguros, el seminario se desarrolló con éxito, contó con la participación de más de 75 personas de 6 aseguradoras, incluso con participantes que llegaron del exterior. Los expertos Mario Terceros, Javier Via Giglio, Alberto Hugo Fainstein, Luis Alberto Soliz y Ricardo Castillo fueron los disertantes.

CARENCIA DE REGLAMENTO

Hasta la fecha no existe en el país un Reglamento de Construcción que norme y oriente tanto a los constructores, desarrolladores inmobiliarios y principalmente consumidores sobre las características que deben cumplir las construcciones en general. La ausencia de esta herramienta permite que el mercado de construcción se maneje principalmente por la oferta y demanda (precio por metro cuadrado construido), dejando de lado la calidad final del resultado (habitabilidad, seguridad, durabilidad, diseño), asegura el ingeniero civil Javier Via Giglio.

En general, todos los demás países tienen una referencia normativa de aplicación obligatoria que regula el diseño, la ejecución y el uso de materiales en los proyectos de construcción; los sistemas alternativos de construcción están contemplados dentro estas normativas, que se actualizan periódicamente, quedando delimitado su campo de aplicación y garantizando el resultado previsto.

Esto, según Javier Via Giglio, genera confianza en la sociedad en su conjunto porque no existen dudas en cuanto a su idoneidad, a los resultados que se pueden obtener, permitiendo el financiamiento de los proyectos bajo las mismas condiciones que los que se construyen con sistemas tradicionales y que las compañías de seguros puedan ofrecer sus servicios y productos sin que ello signifique incrementos de las primas o franquicias.

En el mercado nacional, actualmente se ofrecen diversos sistemas constructivos, cuya aplicación abarca desde el sector industrial, pasando por la vivienda social hasta los proyectos habitacionales de alta gama. En varios casos, ya se cuenta con plantas industriales establecidas en el país, con millonarias inversiones realizadas, que proveen estos sistemas en distintas modalidades (solo provisión con asesoramiento, provisión e instalación, llave en mano) y en otros casos son representaciones de productos que se importan para proyectos específicos.

También es importante destacar que la Agencia Estatal de Vivienda (AEVI) ya aprobó varios sistemas alternativos de construcción, los cuales figuran en su “Manual de Construcción de Viviendas Sociales”, habiendo construido cerca de 2.000 unidades de vivienda con estos sistemas a la fecha, destacándose el proyecto Altos de Cotoca con 960 unidades, distribuidas en 30 bloques de 4 pisos, utilizando el Sistema Constructivo Autoportante Panel FORTE-M2 de la empresa Casa Ideal con planta industrial en el PILAT-Warnes y la Urbanización Papa Francisco, con más de 440 viviendas, donde se empleó el sistema de hormigón armado con encofrados metálicos importados.

El nivel de industrialización del país y la tecnología disponible localmente todavía limita el uso de todas las alternativas existentes pero se ha logrado un gran avance en la última década, debido principalmente a la iniciativa privada que ha visto una oportunidad en el contexto del cambio climático.

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