
Diseñado por los arquitectos Iván Lengstorff y Renato Trujillo junto al equipo de Skizze, el espacio presentado en CASACOR Bolivia redefine el corazón del hogar como un escenario de conexión emocional, funcionalidad e innovación.
Con la convicción de que la cocina es mucho más que un espacio funcional, “un lugar donde se comparten tradiciones, se crean recuerdos y se celebra la cultura familiar”, Iván Lengstorff y Renato Trujillo intervinieron “Tramontina Lounge”, un lugar pensado no sólo para mostrar diseño y tecnología, sino también para invitar a las personas a conectarse, compartir y vivir experiencias en torno a la cocina, el corazón del hogar.
Desde 2017, los arquitectos han sido protagonistas habituales de CASACOR Bolivia, un escenario que impulsa la experimentación creativa y el diálogo entre arquitectura, diseño e interiorismo. Para ellos, la muestra es una vitrina para desarrollar y exponer nuevas tendencias, un espacio para crear inspiración y compartir su visión con el público.
En esta nueva edición, los profesionales se inspiraron en el lema: “La conectividad en la cocina entrelaza sueños, sabores e historias”.
Tramontina Lounge abarca una superficie de 70 metros cuadrados, compuesto por dos ambientes que fusionan el concepto de Lounge/Bar con la cocina principal de la casa.
Fue concebido como una experiencia progresiva donde los visitantes pueden comenzar compartiendo aperitivos en un área más relajada y luego pasar a la cocina para disfrutar, crear historias y entrelazar relaciones.
La funcionalidad es clave, ya que cada detalle del diseño está pensado para facilitar el uso del espacio y fomentar la interacción espontánea entre quienes lo habitan, creando una experiencia sensorial completa.
La disposición del mobiliario, la iluminación estratégica y los materiales naturales se combinan para reforzar esta experiencia de conexión genuina.
Los materiales seleccionados buscan equilibrar elegancia, calidez y sostenibilidad. Se combinan maderas en distintos formatos, piedras naturales y superficies sinterizadas en tonos oscuros, aportando textura y sofisticación.

La vegetación interior incorpora la biofilia como parte esencial del diseño, mientras que los tonos neutros en muros y mobiliario fijo generan armonía.
Mobiliarios de suaves tejidos y una iluminación tenue en tonos cálidos crean una atmósfera acogedora, destacando puntualmente las áreas equipadas con productos Tramontina, que aportan diseño, tecnología y confort.
Detalles en azul, junto a artefactos de última tecnología —lanzamientos exclusivos para el país— refuerzan la identidad de la marca, transmitiendo innovación, confianza y estilo.